Evolución de la didáctica de las Ciencias Sociales en la escuela de América Látina.
Los maestros de Ciencias Sociales en el siglo XIX tuvieron una manera muy particular o “tradicional” de enseñar, la cual es muy distinta al proceso de enseñanza - aprendizaje que se brinda en la actualidad a la gran mayoría de estudiantes. Todo esto, sin duda tiene que ver con la evolución de la didáctica de las CC.SS a nivel mundial. Así mismo, para hablar de la evolución de la Didáctica de las CC. SS, tenemos que saber cuál es el significado de “Didáctica”, para luego comprender su evolución en las CC.SS.
Según Juan Mallart (2001), nos dice que la Didáctica es la “ciencia de la educación que estudia e interviene en el proceso de enseñanza - aprendizaje con el fin de conseguir la formación intelectual del educando”. Pero, no sólo debe lograr la formación intelectual como lo menciona Mallart; sino que, debe lograr un desarrollo integral en cada estudiante.
En este sentido, la Didáctica hace referencia al conjunto de métodos, herramientas y técnicas que posibilitan el encuentro y la dinámica entre la enseñanza y el aprendizaje. Por consiguiente, es necesario cuestionarnos sobre la evolución de la Didáctica de las Ciencias Sociales en América Latina desde el siglo XIX hasta la actualidad; ya que, según las estadísticas de los últimos exámenes tomados a nivel mundial, por el Programa Internacional para la Evaluación de Estudiantes (PISA) (2014), nos dicen que “Los estudiantes de América Latina no resuelven problemas de la vida real”.
Entonces nos conlleva a preguntarnos lo siguiente, ¿Habrá sido necesario la evolución de la Didáctica de las Ciencias Sociales en las escuelas de América Latina?
Considero que, si ha sido necesario la evolución de la Didáctica de las Ciencias Sociales; puesto que, las Ciencias Sociales cada año se adapta a una serie de cambios producidos por el entorno social, lo cual esto influye en el proceso de enseñanza - aprendizaje de los estudiantes. En suma; puedo decir que, la evolución de la Didáctica de las Ciencias Sociales ha sido y es necesario, justamente para que responda al nuevo contexto social - educativo en el que se encuentran los estudiantes.
Para hablar de la evolución de la Didáctica de las Ciencias Sociales, tenemos que mencionar las corrientes de pensamiento que influenciaron en su evolución, tales como: el Positivismo, el Humanismo y la Socio-Crítica. Y en base a estas corrientes de pensamiento, surgieron los llamados Paradigmas Positivista, Humanista y Socio-Crítica.
Ahora, veamos en que consiste cada uno de uno de estos paradigmas. El Paradigma Positivista, según Federico Marín (2002); nos dice que “el sujeto que aprende se mantiene pasivo y se aprende acumulando memorísticamente los hechos ya ocurridos (datos)”. Añadiendo que; el positivismo iba de la mano con el modelo tradicional, el cual estaba basado en una metodología dogmática, donde el estudiante no podía cuestionar los saberes del profesor y su aprendizaje solo estaba ligado a la memorización y repetición de contenidos escolares.
En suma, Federico Marín (2002); nos dice que “La educación con base positivista persigue conseguir un individuo inflexible, de mentalidad cerrada, individualista y a- crítico. No permite la formulación de explicaciones que requieran un examen crítico y generalizaciones fundamentales en juicios críticos”. Precisamente este tipo de paradigma actualmente, no sería el más óptimo en la Didáctica de Ciencias Sociales; ya que, solo se basa en la memorización y repetición de contenidos, cuando las Ciencias sociales se fundamenta en las acciones que realiza el ser humano en su entorno social. A sí mismo, porque las Ciencias Sociales no sigue un patrón ya determinado; sino que está sujeto a múltiples variaciones dependiendo de la subjetividad del estudiante, el cual siempre está modificando su realidad.
Por otro lado, encontramos al Paradigma Humanista. Según Carlos Chanto y Marlene Durán (2014); nos dicen que “El Paradigma Humanista en la educación refleja el interés del ser humano por superar vacíos que la educación tradicional u otras ideologías han dejado en el ser. Por ello, el reconocimiento del potencial y las cualidades individuales representan una necesidad que debe ser abarcada y acatada por el sector educativo, con miras a brindar un mejor apoyo a la formación y consolidación pedagógica en nuestras sociedades.” Es así que, el Paradigma Humanista va a retomar y moldear la enseñanza de la antigua escuela que estaba basada en el Modelo Tradicional y se va a enfocar en ayudar al estudiante a ser él mismo y no ser como los demás quieren que él sea, sobretodo si nos referimos al campo de las Ciencias Sociales.
En añadidura, el Paradigma Humanista ayuda a desarrollar la individualidad de cada estudiante y construir su propio aprendizaje en base a sus experiencias con el entorno social. Ahora, vale recalcar que este paradigma, presenta una postura totalmente diferente a la mencionada anteriormente; de manera que, posibilita que la Didáctica de las Ciencias Sociales no sólo esté enmarcada a que el estudiante sea un memorizador de contenidos, sino que trascienda más allá de su posición inicial.
En adición, Andreas Schleicher (2016); nos dice que “Si uno los llena con contenido, habrán aprendido conocimiento, pero donde veo grandes deficiencias en América Latina es en la capacidad de los estudiantes de participar, de entusiasmarse con lo que aprenden". En otras palabras; nos dice que, los estudiantes de América Latina no tienen la capacidad de participar sobre su propio aprendizaje y que no están aprendiendo con entusiasmo. Por esta razón diríamos que, el Paradigma Humanista todavía no funciona en su totalidad para la Didáctica de las Ciencias Sociales, en gran parte de las escuelas de América Latina.
Por último, se nos presenta al Paradigma Socio- Crítica. Según José Touriñán y Rafael Sáez (2012); nos mencionan que este Paradigma “trata de hacer ciencia humana y social a la luz de preguntas por determinados valores, utilizando tanto procedimientos empíricos- analíticos (explicación), como hermenéuticos (comprensión), orientada por el interés emancipativo y dirigida a hacer una sociedad buena, humana y racional”.
Agregando a lo anterior, el Paradigma Socio- Crítica a diferencia del Paradigma Humanista no se va a enfocar solamente en el conocimiento subjetivo del estudiante; sino que, se va a focalizar en la participación activa del estudiante en el desarrollo de su entorno social. De igual manera, Severino Fernández (1995); acotó que “la perspectiva crítica o socio – crítica no se conforma con explicar y controlar las relaciones sociales, sino que busca crear las condiciones mediante las que dichas relaciones puedan ser transformadas en acción organizada (…)”. En esa misma línea, este Paradigma intenta liberar al estudiante de la ignorancia, a través de una formación reflexiva y crítica; con la finalidad de convertirlo en un individuo capaz de plantear soluciones frente a los conflictos sociales. A sí mismo, diríamos que este tipo de Paradigma es el que responde mejor a las demandas educativas de las escuelas de América Latina en el S.XXI.
En conclusión, los Paradigmas que influenciaron en la evolución de la Didáctica de las Ciencias Sociales hicieron que el proceso de enseñanza – aprendizaje de los estudiantes sea más completa e integral. De igual forma, debemos finalizar respondiendo a nuestra interrogante inicial, ¿Habrá sido necesario la evolución de la Didáctica de las Ciencias Sociales en las escuelas de América Latina? Para lo cual, diremos que sí; ya que, con este último Paradigma Socio – Crítica nos permite responder al contexto social - educativo en el que se encuentran los estudiantes de América Latina.